Teoría del control de la apertura: una investigación de la modulación del dolor
La teoría del control de puertas, o Gate Control Theory, es un modelo neurofisiológico que explica el fenómeno de la modulación del dolor. Este modelo, propuesto en 1965 por los neurofisiólogos Melzack y Wall, ha tenido una influencia significativa en la comprensión del sistema nervioso y del dolor.
El concepto detrás de esta teoría es que el sistema nervioso puede ser análogo a una puerta, a través de la cual entran y se controlan las señales de dolor (nociceptivas). Las fibras sensoriales de gran diámetro (fibras aferentes grandes) y las de diámetro pequeño (fibras aferentes pequeñas) son los elementos clave de la teoría. Las fibras de gran diámetro transmiten información sobre estímulos no nocivos, mientras que las de pequeño diámetro transmiten estímulos nocivos y dan lugar a dolor.
Según esta teoría, el dolor agudo crónico y postraumático está controlado centralmente por el sistema nervioso mediante la inhibición de la transmisión aferente nociceptiva. Esta inhibición se logra a través de pequeñas fibras aferentes, que estimulan las fibras motoras y la liberación de enzimas inhibidoras del dolor. Esto se puede conseguir con el tratamiento Quantum Re-Generation, una nueva tecnología innovadora que utiliza la emisión de microcorrientes despolarizantes de alto voltaje para actuar sobre el tejido muscular y estimular las fibras motoras con una acción descontracturante.
La Re-Generación es una técnica de electroanalgesia basada en el uso de microcorrientes pulsadas, con un tiempo de cronaxia de una millonésima de segundo por pulso. Éste actúa sobre los receptores de la fibra C (especializados en transmitir la sensación de dolor de forma lenta y profunda) para dar ‘contrainformación’. Esto provoca una reducción inmediata del dolor y, al igual que repetir esta terapia, puede a su vez modificar los circuitos sensoriales alterados que causan hipersensibilidad al dolor.
Re-Generation ha demostrado ser extremadamente útil para varios tipos de dolor, como el dolor neuropático, el dolor por cáncer y el dolor musculoesquelético. Ha obtenido resultados positivos en casos de síndrome de pinzamiento subacromial, tendinitis del manguito rotador, fascitis plantar, gonartrosis por artrosis degenerativa, disfunción del ligamento de la cadera, dolor temporomandibular crónico, disfunción temporomandibular, rigidez neurológica por enfermedad de la motoneurona, enfermedad de Parkinson y también en el ámbito veterinario para el tratamiento de perros con artrosis degenerativa de las patas.
Re-Generation fue bien tolerado por todos los pacientes tratados y no mostró efectos secundarios de ningún tipo. Todos los pacientes mostraron una reducción significativa del dolor, y el tratamiento demostró ser muy eficaz y, en particular, en el tratamiento del dolor del cáncer que no responde a los opioides.
